¿RESACA O BORRACHA?
- 9 may 2018
- 2 Min. de lectura

Las resacas a los 20s, aunque en ese momento no las valorábamos #unonosabeloquetienehastaquelopierde, eran una maravilla. Juergueabas hasta las 5 de la mañana y ya estabas parada para ir a la universidad a las 7. Con cara de persona de su casa, una peinadita, un halls y estabas lista para conquistar el mundo. Eras casi 92% útil, piel de poto de bebé, pelos sin frizz y arreglados. Como si no te hubieras desgraciado y metido un juergón mortal unas horas antes. Ahora… esa historia ha quedado en el pasado. Ahora ya ni siquiera te despiertas con resaca, te despiertas borracha. Te despiertas y no sabes dónde estás ni que pasó en la noche. Te paras de tu cama a duras penas y te das cuenta de la triste realidad. Sigues borracha. El alcohol consumido horas antes sigue haciendo efecto, tu cuerpo no ha sido capaz de procesarlo. Te pasas la mañana un poco golpeada, pero piensas ingenuamente, “esto podría ser peor”. Todavía tienes esa chispa que te da el alcohol, que te hace pensar que eres la persona más graciosa y divertida, pero en realidad no. Y pasas la mañana ilusamente engañada, pensando que lo peor ha pasado. Luego llega el almuerzo, tragas como si fuera el fin del mundo #mejorqueexploteaquesobre. Después de haber comido como neandertal, te das cuenta que algo no cuadra, de pronto no te sientes tan bien. Respiras hondo, haces un OM a lo yoga style y continúas con tu día. Hasta que te llega, ese momento crítico y de desesperación. Un lapo de realidad. Un intenso dolor de cabeza, náuseas, mareos, irritabilidad, y no estoy hablando de la regla. Es la RESACA. La maldita ha venido por ti después de todo. Cantaste victoria antes de tiempo. Y ahora viene para recordarte que no te puedes librar de ella. Empiezan las pequeñas taquicardias. Quieres dormir, pero no puedes. Llega la noche, y luego de 4 migradorixinas, 3 galones de agua y toda tu alegría de vivir tirada al tacho, juras por el regreso de las Spice Girls, que nunca volverás a chupar y juerguear de esa asquerosa manera. Después llega el siguiente matri, despedida de soltera, cumpleaños de tu perro, aniversario, viernes y te olvidas de lo que había pasado #todoseaporlaamistad.
¡Que vivan los 30! Si tomas no manejes.
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